Un brillante ensayo en el que Zola disecciona la relación entre literatura y dinero, empezando con un recorrido histórico sobre la forma en que han subsistido los escritores a lo largo del tiempo. Desde el modelo del escritor al servicio de reyes, nobles y poderosos, hasta el modelo de libre mercado contemporáneo, del que el autor se muestra claramente partidario, al asegurar, por una parte, la independencia intelectual del escritor y, por otra, garantizar así que el esfuerzo y el talento sean reconocidos y retribuidos.
Un planteamiento original, en el que se posiciona en contra de cualquier tipo de subsidio, ayuda o intervención estatal, tanto a favor de los escritores como de la propia industria del libro. Un ensayo que, a la vista de la crisis del modelo de las industrias culturales que se está viviendo actualmente, merece ser leído para abrir una reflexión profunda y desmitificadora de lo que supone el oficio de escritor.