No hay más información sobre el texto «Las Tijeras».
Este texto forma parte del libro «Cuentos Sacroprofanos».
No hay más información sobre el texto «Las Tijeras».
Este texto forma parte del libro «Cuentos Sacroprofanos».
Descargar Kindle «Las Tijeras»
Edición dislexia «Las Tijeras»
Enviar a Pocketbook «Las Tijeras»
Cuadró bien la idea al padre, y la misma madre vio que era el único recurso; y habiendo elegido el desterrado Manila, a Manila se le despachó con muy apremiantes cartas de recomendación para el rector de un convento de nuestra Orden.
A los seis meses empecé a recibir gratas noticias de la conducta de mi recomendado: alababan su laboriosidad, su listeza; iba enmendándose. Los viejos, al saberlo, no cabían en su pellejo de gozo. Era el rector el que me transmitía tan buenas nuevas, pues el muchacho no acostumbraba escribir.
Así pasó algún tiempo, hasta que un día la carta del rector, en vez de felicidades, trajo una nueva terrible: el hijo de don Andrés había sido muerto a cuchilladas, en riña, al salir de una gallera. Yo quedaba encargado de ponerlo en conocimiento de los padres.
Triste era la comisión, pero de tristezas andamos rodeados siempre, y juzgando que el padre tendría más fortaleza en el primer momento que la madre, llamé a mi celda a don Andrés y trasteándole lo mejor que supe, le hice beber el trago. No estuvo reacio en comprender: más bien parece que adivinaba. Apenas indiqué «heridas», tradujo «muerte». No lloró, pero la expresión de su cara era como la del reo cuando, al abrirse la puerta de la prisión, se encuentra al pie de la escalera del patíbulo (y me sirvo de esta comparación porque he auxiliado a algunos infelices en tan amargo trance).
5 págs. / 9 minutos.
44 visitas.
Publicado el 15 de noviembre de 2020 por Edu Robsy.
Este texto no ha recibido aún ninguna valoración.
Para valorar «Las Tijeras» es necesario identificarse en textos.info.
608 libros publicados.