Una de las obras de Eurípides más antiguas que se conservan
Alcestis (Άλκηστις / Alkēstis) es una de las más tempranas obras supervivientes del dramaturgo griego Eurípides. La obra fue probablemente producida por primera vez en las Dionisias del año 438 a. C., estando ya avanzada la carrera del autor. A veces se la caracteriza como una obra satírica y a veces como un melodrama.
Eurípides la presentó como la pieza final de una tetralogía con la que ganaría el segundo premio. Se aceptó Alcestis a pesar de que se entendía que la última pieza de una tetralogía había de ser un drama satírico, cosa que no era en propiedad. Las otras tres obras eran Las cretenses (Κρῆσσαι), Alcmeón en Psófide (Ἀλκμαίων ὁ διὰ Ψωφῖδος / Alkmaiōn ho dia Psophidos) y Télefo (Τήλεφος / Tēlephos).
Apolo, tras matar a los Cíclopes, fue exiliado del Olimpo durante nueve años, y los pasó al servicio del rey de Tesalia, Admeto, un hombre conocido por su hospitalidad y que lo trató muy bien. En agradecimiento, Apolo consiguió para Admeto que las Moiras le concediesen vivir más allá de la fecha de su muerte. El regalo, sin embargo, tiene un precio: Admeto debe encontrar a alguien que lo sustituya cuando la Muerte venga a reclamarlo.
Ha llegado el momento de la muerte de Admeto, y no ha encontrado quien lo sustituya. Su padre no desea entregarse y cree que es ridículo que le pidan abandonar una vida que disfruta tanto. Finalmente, la devota esposa de Admeto, Alcestis, se ofrece para ser llevada en su lugar, porque no desea dejar a sus hijos sin padre ni ser abandonada por su amado, y ella está próxima a la muerte.