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ensayo metaliterario.
7 págs. / 13 minutos / 291 KB.
28 de septiembre de 2019.
Una nueva
relectura me llevó a la conlusión tan acertada por ese crítico del que
ya os he leído la cita: el cuento del molinero está plagado de símbolos.
Mi compañera S... os destapó el otro día alguno de ellos (debo confesar
que no estaban mal elegidos; os refresco la memoria: piel como monedas
de oro (simbología del oro), la cabritilla, el canto de la golondrina
posada en el granero, boca dulce como la miel o como una manzana
colocada sobre el heno, potrillo, alta como un mástil, tiesa como una
flecha.
Pero hay más, mucho más. No hay nada fortuito en
las palabras que usa Chaucer, ni siquiera en el nombre de los
personajes, al menos en los centrales. Posiblemente nos llevaría mucho
tiempo desbrozar toda la paja del grano y desgraciadamente el reloj de
arena sólo se para para que le dén la vuelta.
Voy a hacer
una enumeración y si me da tiempo voy a dar la explicación de algunos
de estos símbolos, algunos asombrosamente evidentes y que estaban allí,
desde el principio, como las setas bajo los pinos, pero a veces las
prisas son traicioneras. Repito, si no queda tiempo, ya os he dado las
claves que están el el jardín, en los senderos a seguir que, sin
embargo, como en el relato de Borges, casi siempre se bifurcan.
Ahí va la lista, atrofiada por todas partes:
- En las descripciones, en las que se nos da todo lujo de
detalles, estos detalles, o muchos de ellos, son simbólicos y nos dicen
de forma soterrada mucho o todo lo que va a suceder, o cuanto menos
como va a comportarse o es tal o cual personaje.
[...]
Chaucer nos describe a la mujer como muy guapa, en la superficie. Pero
sus palabras son un arma de doble filo, porque entrañan ironía y un
significado simbólico que se contrapone radicalmente a lo que en
apariencia dice. Las apariencias engañan y así, las apariencias de las
palabras también engañan. Hablando de engaño, ¿os acordáis de las citas
del principio? Todo gran escritror es un gran embaucador, el poeta es un
fingidor. Embaucar, fingir, aparentar, engañar son sinónimos o casi
sinónimos.
Conclusión : Chaucer es un gran poeta y un gran
escritor. Chaucer es, sin lugar a diudas, (aquí lo hemos intentado
demostrar) un genio, y me atrevo a afirmar -no soy el primero que lo
hace, ni el último- una de las tres mayores figuras de la literatura
inglesa.
Y para que este cuento sea perfecto, vamos a cerrar el círculo copiando al molinero:
Así acaba la historia, y que Dios os proteja.
Aunque quizás fuera más correcto utilizar una fórmula tradicional, pero posiblemente desconocida por muchos. Ahí va:
Y colorín colorado, este cuento se ha acabado.