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SEN.
¡Feliz mil veces ¡oh valiente joven!
El pueblo que es tu patria!
TODOS
-¡Viva Abdala!
(Se van el Senador y consejeros.)
ABDALA
ABD.
¡Por fin potente mi robusto brazo
Puede blandir la dura cimitarra,
Y mi noble corcel volar ya puede
ligero entre el fragor de la batalla!
¡Por fin mi frente se orlará de gloria;
Seré quien libre a mi angustiada patria,
Y quien lo arranque al opresor el pueblo
Que empieza a destrozar entre sus garras!
¡Y el vil tirano que amenaza a Nubia
Perdón y vida implorará a mis plantas!
¡Y la gente cobarde que lo ayuda
A nuestro esfuerzo gemirá espantada!
¡Y en el cieno hundirá la altiva frente,
Y en cieno vil enfangará su alma!
¡Y la llanura en que su campo extiende
Será testigo mudo de su infamia!
¡Y el opresor se humillará ante el libre!
¡Y el oprimido vengará su mancha!
Conquistador infame: ya la hora
De tu muerte sonó: ni la amenaza,
Ni el esfuerzo y valor de tus guerreros
Será muro bastante a nuestra audacia.
Siempre el esclavo sacudió su yugo, -
Y en el pecho del dueño hundió su clava
El siervo libre; siente la postrera
Hora de destrucción que audaz te aguarda,
¡Y teme que en tu pecho no se hunda
Del libre nubio la tajante lanza! -
Ya me parece que rugir los veo
Cual fiero tigre que a su presa asalto.
Ya los miro correr: a nuestras filas
Dirigen ya su presurosa marcha.
Ya luchan con furor: la sangre corre
Por el llano a torrentes: con el ansia
Voraz del opresor, hambrientos vuelven
A hundir en sus costados nuestras lanzas,
Y a doblegar el arrogante cuello
Al tajo de las rudas cimitarras:
Cansados ya, vencidos, -cual furiosas
Panteras del desierto que se lanzan
A la presa que vencen, y se fatigan,
Y rugen y se esfuerzan y derraman
La enrojecida sangre, y combatiendo
Terribles ayes de dolor exhalan,
Así los enemigos furibundos
A nuestras filas bárbaros se lanzan,
Y luchan, -corren, -retroceden, -vuelan, -
Inertes caen, -gimiendo se levantan, -
A otro encuentro se aprestan, -¡y perecen!
Ya sus cobardes huestes destrozadas
Huyen por la llanura: -¡oh! ¡cuánto el gozo
Da fuerza y robustez y vida a mi alma!
¡Cuál crece mi valor! ¡Cómo en mis venas
Arde la sangre! ¡Cómo me arrebata
Este invencible ardor! -¡Cuánto deseo
A la lucha partir! -
8 págs. / 14 minutos.
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Publicado el 29 de agosto de 2018 por Edu Robsy.
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