—Emilio—me dijo un día—; hace cinco años que estoy á tu lado y puedo
decir que cinco años que nací. Tú me has educado; tú has desplegado ante
mis ojos las páginas de una vida que no conocía, tú eres 'para mí mi
padre... madre... patria... poesía... todo... todo. ¿Qué soy yo para ti?
—¡Tú! ¿Qué eres tú? Eres yo. Toda mi existencia.
—¿Pero cómo me amas?
—Como se puede amar al padre, á la madre, al hijo, al hermano, á la patria y á la poesía.
—¿Y no me amas como... como..un esposo?
Entonces la tomé de la mano y cometí la barbarie de contarle todo lo que pasaba dentro de mí.
Eugenia me escuchaba llorando; cuando terminé de hablar, se levantó y me dijo con voz ronca.
—Tú me has hecho una mujer educada, ya no soy la pobre muchacha que
encontraste en la calle... Aquella era otra. Yo te conozco de hace mil
años: he venido de otro país, de otro mundo, á buscarte, y necesito tu
amor. Te crees que hay menos pureza en mi alma porque mi cuerpo esté
manchado, que en esas jóvenes cubiertas de azahares que se casan con un
hombre al que no ama?
29 págs. / 52 minutos.
8 visitas.
Publicado el 21 de enero de 2025 por Edu Robsy.
Valoraciones
Este texto no ha recibido aún ninguna valoración.
Para valorar «Alucinación» es necesario identificarse en textos.info.