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Edición física «La Señorita Perla»
— ¡Ah!
Todos me miraban, y Chantal exclamaba aplaudiendo:
— ¡Es Gastón! ¡Es Gastón! ¡Viva el rey! Viva el rey! — Todos repetían en coro:— ¡Viva el rey!. — Me ruboricé hasta la punta de mis orejas, como sucede a menudo sin razón, en situaciones que son un poco tontas. Yo permanecí con los ojos bajos, sujetando entre dos dedos esta semilla de porcelana, esforzándome a reír sin saber qué hacer o decir, cuando Chantal prosiguió:
— Ahora, debe elegir una reina.
Entonces yo estaba aterrorizado. En un segundo mil pensamientos y suposiciones cruzaron mi mente. ¿Querían que yo escogiera una de las señoritas Chantal? ¿Era este un truco para hacerme decir cuál de ellas prefería? ¿Era una suave, ligera presión indirecta de los padres hacia un posible matrimonio? Las ideas de matrimonio rondan sin cesar en las casas con hijas casaderas, y toman todas las formas, todos los disfraces, y todos los medios. Un miedo atroz de comprometerme me invadió, y también una extrema timidez ante la actitud obstinadamente correcta y reservada de las Señoritas Luisa y Paulina. Elegir a una de ellas en detrimento de la otra me parecía tan difícil como escoger entre dos gotas de agua; Y entonces el miedo de aventurarme en un asunto donde yo sería conducido al matrimonio a pesar mío, suavemente, por medios discretos e imperceptibles y también tranquilos como este reinado intrascendente, me perturbaba horriblemente.
17 págs. / 30 minutos.
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Publicado el 19 de mayo de 2016 por Edu Robsy.
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