La Pesca Bajo el Sol
Arturo Ambrogi
Cuento
En medio del río, el pescador, desnudo como un Discóbolo, arroja la atarraya. La atarraya se eleva por sobre la cabeza del pescador, se despliega totalmente y cae sobre la linfa espejeante, sutil y resplandeciente al sol del medio día, como una desmesurada tela de araña.
Se ve, claramente, cómo se despliega y cómo cae la atarraya sobre la tersa superficie del agua. Y cómo en seguida se sumerge, cómo se encoge, cómo se borra la trama complicada de sus hilos, hasta desaparecer en el fondo, dejando apenas rastro de su paso en una serie de círculos concéntricos que se dilatan y se extienden hasta disolverse. El agua vuelve entonces a cobrar su tersura de moaré.
El pescador espera. Tranquilo, ligeramente resguardado por las anchas faldas de su charra de hiladillo (amarillenta por el efecto de los constantes aguaceros) podría estarse allí clavado por una eternidad, esperando el resultado, en esa misma actitud, inmutable como una deidad indígena de río.
Dominio público
3 págs. / 5 minutos / 125 visitas.
Publicado el 9 de noviembre de 2021 por Edu Robsy.