Textos mejor valorados etiquetados como Sátira | pág. 2

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etiqueta: Sátira


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La Derrota de los Pedantes

Leandro Fernández de Moratín


Cuento, Sátira, Alegoría


Neminem specialiter meus sermo pulsabit.
Generalis de vitiis disputatio est.
Qui mihi irasci voluerit, prius ipse de se,
quod talis sit, confitebitur.

S. HIERONYM., Epist. ad Nepofianum.
 

Esta obra no necesita prólogo; por eso no le tiene. Necesitaba notas, pero el autor no ha querido ponérselas.

Estábase Apolo durmiendo la siesta a más y mejor en un mullido catre de pluma. Un mosquitero verde le defendía de pelusa y moscas; la alcoba tenebrosa y fresca, el palacio en profundo silencio, y el dios bien comido, mejor bebido y nada cuidadoso. Roncaba, pues, su reluciente majestad, haciendo retumbar las bóvedas; y Mercurio, que se había quedado traspuesto en un chiribitil cercano, dábase a Plutón, por no darse al diablo, viendo que los bufidos de su hermano no le dejaban pegar los ojos.

En esto se ocupaban las referidas deidades, cuando de repente se levantó tal estruendo en los patios, corredores y portalón del palacio que parecía hundirse aquella soberbia máquina. Alterose Mercurio, dio un salto de la cama al suelo, y hubo de perder el juicio hallándose a pie, esto es, sin talares, porque madama Terpsícore, la más juguetona y revoltosa de todas las nueve, había ido poco antes a la cama, pasito a pasito, y se los había quitado por hacerle rabiar. Afligiose sobremanera, y a tientas se puso los gregüescos, la chupa y la camisa; porque es fama que el tal dios no puede dormir en verano si no depone todos los trastos, quedándose a la ligera, como su madre le parió.


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Dominio público
47 págs. / 1 hora, 23 minutos / 340 visitas.

Publicado el 10 de abril de 2018 por Edu Robsy.

La Hora de Todos y la Fortuna con Seso

Francisco de Quevedo y Villegas


Cuento, Sátira


Agradecimiento

A Don Álvaro de Monsalve,
Canónigo de la Santa Iglesia de Toledo, primada de las Españas

Este libro tiene parentesco con vuesa merced, por tener su origen de una palabra que le oí. A vuesa merced debe el nacimiento; a mí, el crecer. Su comunicación es estudio para el bien atento, pues con pocas letras que pronuncia, ocasiona discursos. Tal es la genealogía déste. Doyle lo que es suyo en la sustancia y lo que es mío en la estatura y bulto. Su título es: LA HORA DE TODOS Y LA FORTUNA CON SESO. Todos me deberán una hora por lo menos, y la Fortuna sacarla de los orates, que lo más ha vivido entre locos. El tratadillo, burla burlando, es de veras. Tiene cosas de las cosquillas, pues hace reír con enfado y desesperación. Extravagante reloj, que, dando una hora sola, no hay cosa que no señale con la mano. Bien sé que le han de leer unos para otros y nadie para sí. Hagan lo que mandaren y reciban unos y otros mi buena voluntad. Si no agradare lo que digo, bien se le puede perdonar a un hombre ser necio una hora, cuando hay tantos que no lo dejan de ser una hora en toda su vida. Vuesa merced, señor don Alvaro, sabe empeñarse por los amigos y desempeñarlos. Encárguese desta defensa, que no será la primera que le deberé. Guarde Dios a vuesa merced, como deseo.

Hoy 12 de marzo de 1636.


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Dominio público
110 págs. / 3 horas, 13 minutos / 772 visitas.

Publicado el 9 de mayo de 2018 por Edu Robsy.

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