Amor, fruto delicioso que
el Cielo permite a la tierra producir para la felicidad de la vida, ¿por
qué es preciso que hagas nacer crímenes? ¿Y por qué el hombre abusa de
todo?
Noches, de Young
Idea sobre las novelas
Se llama novela [román] a la obra fabulosa compuesta a partir de las aventuras más singulares de la vida de los hombres.
Pero ¿por qué lleva el nombre de novela este género de obra?
¿En qué pueblo debemos buscar su fuente, cuáles son los más célebres?
¿Y cuáles son, en fin, las reglas que hay que seguir para alcanzar la perfección del arte de escribirla?
He ahí las tres cuestiones que nos proponemos tratar, comencemos por la etimología de la palabra.
Dado que nada nos informa sobre cuál fue el nombre de esta
composición entre los pueblos de la Antigüedad, en mi opinión sólo
debemos aplicarnos a descubrir por qué motivo llevó entre nosotros el
que aún le damos.
La lengua romance [romane] era, como se sabe, una mezcla del
idioma céltico y del latín, en uso durante las dos primeras estirpes de
nuestros reyes; es bastante razonable pensar que las obras del género
de que hablamos, compuestas en esa lengua, debieron llevar su nombre, y
que debió decirse romane para designar la obra en que se trataba de aventuras amorosas, como se dijo romance
para hablar de las endechas del mismo género. Vano sería buscar una
etimología diferente a esta palabra; al no ofrecernos el sentido común
ninguna otra, parece fácil adoptar ésta.
Pasemos, pues, a la segunda cuestión.
¿En qué pueblo debemos hallar la fuente de esta clase de obras, y cuáles son los más célebres?
Información texto 'Los Crímenes del Amor'