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Edición física «La Duquesa y el Joyero»
—Vaya —dijo Oliver, mientras se ponía en pie y estiraba las piernas—. Vaya…
Y quedó en pie bajo el retrato de una vieja señora, encima de la chimenea, y levantó las manos.
—He cumplido mi palabra —dijo juntando las palmas de las manos, como si rindiera homenaje a la señora—. He ganado la apuesta.
Y no mentía; era el joyero más rico de Inglaterra; pero su nariz, larga y flexible, como la trompa de un elefante, parecía decir mediante el curioso temblor de las aletas (aunque se tenía la impresión de que la nariz entera temblara, y no sólo las aletas) que todavía no estaba satisfecho, todavía olía algo, bajo la tierra, un poco más allá. Imaginemos a un gigantesco cerdo en un terreno fecundo en trufas; después de desenterrar esta trufa y aquella otra, todavía huele otra mayor, más negra, bajo la tierra, un poco más allá. De igual manera, Oliver siempre husmeaba en la rica tierra de Mayfair otra trufa, más negra, más grande, un poco más allá.
8 págs. / 15 minutos.
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Publicado el 12 de octubre de 2017 por Edu Robsy.
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